Desde el 1 de enero, informa Hitt en Daily News, mantener relaciones sexuales desprotegidas sin informar a la pareja de seropositividad o donar sangre en las mismas condiciones dejará de ser delito penado con hasta 8 años de cárcel y se convertirá en delito leve una pena máxima de seis meses. Los proponentes de la nueva norma sostienen que la previa perpetuaba el estigma de las personas con VIH.