Un sobradamente conocido caso ha desatado múltiples
reacciones en torno a las agresiones sexuales. Aportamos dos visiones
contrapuestas sobre el papel que la pornografía puede tener como desencadenante
de estos comportamientos. En
Deia,
Adaya González recoge posiciones de personas y colectivos vinculados a la instituciones
u organizaciones de lucha frente a la violencia de género o con carácter
feminista, que se presentan como expertas en la materia y apoyan que existe tal
relación. En
Tonic,
Lehmiller plantea, en cambio, que la pornografía violenta no desencadena
comportamientos sexualmente agresivos, aportando en apoyo de esta visión acceso
a investigación y documentación que se echa en falta en el artículo previamente comentado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario