Según informa José
A. Plaza en Diario Médico, la modificación del Real
Decreto 1277/2003, de 10 de octubre, podría ser un mecanismo para eliminar las pseudoterapias de los centros
sanitarios, persiguiendo el intrusismo de personas ajenas a la medicina
que promocionan y utilizan pseudoterapias y favoreciendo que las pseudoterapias
desaparezcan de los centros sanitarios.
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