I.P.
Nova y L.D. informan en Redacción Médica de que si bien
es previsible la entrada en vigor de una ley que regulará el suicidio asistido,
el nuevo Código Deontológico médico, que ya se está elaborando, mantiene la
prohibición de provocar intencionadamente la muerte de los pacientes. Los autores
señalan que los profesionales que participaran en suicidio asistido no
recibirían una sanción deontológica si el nuevo código mantiene una
disposición, presente en la versión actualmente vigente, que indica que no será
viable si el médico actúa amparado por las leyes del Estado.
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